FIRMA INVITADA: Laura Fernández, directora del Instituto Andaluz de la Mujer

El día 8 de marzo conmemoramos una de las fechas claves en la agenda feminista internacional, el Día Internacional de las Mujeres. Desde el Instituto Andaluz de la Mujer queremos hacer una reflexión sobre los avances y los retos desde una perspectiva interseccional sobre las mujeres con discapacidad y las políticas públicas de la Consejería de Igualdad, Politicas Sociales y Conciliación en materia de igualdad ,que no dejan a ninguna mujer atrás.

Una de las grandes reivindicaciones del movimiento feminista se centra en la necesidad de reconocer la diversidad que nos caracteriza como seres humanos y que, indudablemente, se refleja en la ausencia e inexistencia de un “único modelo de mujer”. De ahí la necesidad y obligación de hablar de MUJERES, en plural, para visibilizar y reconocer esta diferencia, con el objetivo de dar respuesta a las múltiples discriminaciones que sufren las mujeres, por el hecho de serlo, agravadas por otras situaciones, vivencias, historias y circunstancias personales y sociales.

Partiendo de esta premisa, uno de los actuales retos de la sociedad democrática para garantizar la igualdad de oportunidades y el desarrollo integral de todas las personas es, precisamente, reconocer una cuestión clara y evidente: las mujeres con discapacidad están expuestas a mayores dinámicas de discriminación, desigualdad y violencia por el hecho de ser mujeres y además tener algún tipo de discapacidad. Fruto de una sociedad machista y capacitista ser mujer con discapacidad es un claro factor de riesgo y vulnerabilidad y, por ello, las instituciones públicas y la sociedad tienen que dar respuesta con acciones concretas y específicas que atiendan a la diversidad y, en este caso, a la discapacidad.

Por ello, hemos desplegado en estos años políticas útiles y concretas que dan respuesta a las necesidades reales y escuchan al movimiento feminista de mujeres con discapacidad, trabajando con ellas y actuando en consecuencia con nuestros valores de respeto a la diversidad, inclusión y garante de los Derechos Humanos.

Estas políticas abarcan los dos ámbitos fundamentales de trabajo del Instituto Andaluz de la Mujer, por un lado la promoción de la igualdad de género entre mujeres y hombres, en este caso para visibilizar a mujeres con discapacidad, generar referentes femeninos con discapacidad, y aumentar su participación social, política, económica y cultural para nutrir y conseguir un avance de todas las mujeres. Y, por otro lado, la atención de todas las manifestaciones de la violencia machista desde el reconocimiento de la múltiple discriminación y violencia que sufren las mujeres, teniendo que especializarla y adaptarla para dar una respuesta integral y profesional a las mujeres con discapacidad.

Y como siempre defiendo, las palabras hay que demostrarlas con hechos y acciones concretas, por ello trabajamos por la visibilización de las mujeres con discapacidad de forma transversal en todas las campañas del Instituto Andaluz de la Mujer, por ejemplo la campaña institucional del 8M, y acciones, como el calendario escolar coeducativo, donde el alumnado andaluz podrá formarse en igualdad a través de las historias de vida de mujeres andaluzas que tienen algún tipo de discapacidad. Queremos que la sociedad andaluza piense en femenino cuando hablamos de éxito, de liderazgo o de cuestiones de ámbito público, es nuestro objetivo que en esa introducción de mujeres en el imaginario colectivo se respete precisamente esta diversidad de la que estamos hablando, porque romper y luchar contra la desigualdad implica necesariamente trabajar por la igualdad real y efectiva de todas las mujeres.

Del mismo modo, Andalucía cuenta con una red de servicios de atención a la mujer que es referente a nivel internacional y en la que las mujeres con discapacidad van a recibir una atención especializada desde los centros provinciales hasta en situaciones de urgencia como entrar en el sistema de atención y acogida a víctimas de violencia de género, donde tenemos espacios habilitados y concretos disponibles para dar respuesta de forma rápida y eficiente. En este sentido, y como medio para mejorar nuestra atención hemos desarrollado un protocolo de atención específico para las mujeres víctimas de violencia de género que tienen algún tipo de discapacidad, para recoger los procedimientos, actuaciones, las buenas prácticas y la formación para el personal de nuestros centros, reconociendo y adaptada a los diferentes tipos de discapacidad, que pueden presentar diferentes y diversas dificultades. Desde el Instituto Andaluz de la Mujer, de forma coherente con nuestros principios, entendemos que es necesario hablar de mujeres con discapacidad, pero que la discapacidad tiene muchas caras, historias y circunstancias, y si queremos dar respuesta a la violencia de género en las mujeres con discapacidad tenemos que atender necesariamente a la intersección con cada tipo de discapacidad.

Hemos desarrollado acciones concretas para seguir acercando los servicios públicos de atención a la mujer a las mujeres con discapacidad a través de la accesibilidad cognitiva, por ello hemos colaborado con la  Dirección General de Personas con Discapacidad e Inclusión en la publicación de legislación, manuales, guías sobre la materia del IAM, adaptadas a lectura fácil y estamos participando en el grupo de trabajo de esa DG, en criterios de Accesibilidad Universal y sobretodo cognitiva, que diseñará un catálogo de señalización único para todos los edificios públicos de Andalucía, incluidos nuestros Centros Provinciales de la Mujer, con el objetivo de transformar y acercar los espacios y la señalítica de manera comprensible y entendible por todas las personas

El feminismo debe ser inclusivo y con un enfoque interseccional, porque sólo así conseguiremos la igualdad real entre mujeres y hombres, y en este 8M, Día Internacional de las Mujeres no podemos privar a mujeres más oprimidas y violentadas, como las mujeres con discapacidad, de reivindicar sus derechos y denunciar la múltiple discriminación que sufren día a día por ser mujeres y por tener algún tipo de discapacidad.

Desde el IAM nuestro motor y nuestro compromiso es claro: o avanzamos todas juntas o esto no es feminismo.

Laura Fernández

Directora del Instituto Andaluz de la Mujer