La ONCE premia a la solidaridad andaluza

Aquellas personas que ofrecen su apoyo, su colaboración, su esfuerzo, su cariño, su comprensión, su trabajo, su conocimiento y, por qué no decirlo, su amistad a los demás desinteresadamente y con el único afán de ayudar a las personas con diferentes necesidades merecen un homenaje y ONCE Andalucía, como desde hace ya seis años, les ha concedido los premios ‘Solidarios’.

Con este galardón se reconoce su compromiso social a un medio de comunicación, a una empresa, a una persona, a una ONG y a una institución pública que sobresalen en este campo.

En 2018, ONCE Andalucía ha querido obsequiar al programa ‘Espacio de Encuentro’, que dirige Miguel Doña en la Cadena SER Andalucía, por su apuesta en defensa de la diversidad social; la empresaria almeriense Rosalía Navarro de Navarro Pasarela, impulsora de la Micropasarela Solidaria; el periodista de Canal Sur Radio, Valentín García, por su batalla emprendida contra el cáncer; la Fundación ‘Márgenes y Vínculos’, de Los Barrios (Cádiz), dedicada al acogimiento familiar y lucha contra los abusos a menores; y la Universidad de Granada por sus proyectos de cooperación.

Los premios ‘Solidarios’ generan una ilusión que no se limita a la gala.  Por la mañana, la empresaria de la moda almeriense comentaba con una sonrisa enorme que su vestido no iba a dejar indiferente a nadie. Se sentía orgullosa de su decisión y no quería desvelar su diseño ni siquiera a su familia. Por otro lado, el promotor de la campaña #yomercuro explicaba que, por la tarde, prefería descansar. Aún se encuentra débil por el tratamiento contra el cáncer y quería estar fresco en la gala.

Asimismo, la organización corría de un lado para otro. Del teatro Isabel ‘La Católica’ de Granada, donde tuvo lugar el evento, a la oficina de ONCE en la ciudad, en la que establecieron el centro base para trabajar, sin descanso, para que todo saliese según lo previsto.

A las siete de la tarde llegar las autoridades, los premiados y el público general. Todos ellos se disponían a disfrutar de una gala que aumentó progresivamente en emotividad.

La consejera de Igualdad y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, María José Sánchez Rubio, el alcalde de Granada, Francisco Cuenca, el presidente de la Diputación de Granada, José Entrena, la vicepresidenta del Consejo General, Patricia Sanz, la presidenta del Consejo Territorial en Andalucía, Ceuta y Melilla, Isabel Viruet y el delegado territorial, Cristóbal Martínez de la ONCE posaron ante los fotógrafos antes del inicio del acto.

La encargada de abrir la gala fue la consejera de Igualdad que agradeció el trabajo de la ONCE porque, a su juicio, “no hay ninguna institución similar en el mundo” que lleve a cabo la labor social que hace esta organización en España y Andalucía. A partir de ese momento, Laura Ferrer y Patty Bonet ‘tomaron las riendas’ de la gala en la que se intercalaron vídeos con historias de personas que han conseguido sus objetivos vitales, gracias, sin duda, a su esfuerzo y a las adaptaciones que les ha proporcionado la ONCE, con la entrega de los galardones a los protagonistas de la noche.

El primer premiado en subir al escenario fue el director de ‘Espacio de Encuentro’, Miguel Doña. El periodista, tras recibir el galardón de manos de Isabel Viruet, indicó que, para él, “es un placer que la ONCE se haya acordado de la Cadena SER”. “Los ciegos son los principales oyentes de radio”, destacó.

A continuación, el presidente de la Diputación de Granada entregó el segundo premio a Navarro Pasarela. Rosalía ascendió la escalinata y los espectadores pudieron observar que llevaba puesto un vestido con una falta corta por delante que se alargaba, en forma de cola, por detrás y en el que aparecía 'Oncelio', la imagen de la ONCE. Rememoró que cuando recibió la llamada que le informaba de que había ganado el ‘Solidario’ “el corazón le dio un vuelco”. Se lo dedicó a los niños que participan en su micro-desfile y se mostró visiblemente emocionada durante todo su discurso.

Uno de los momentos más emotivos de la noche ocurrió cuando el portavoz del Gobierno de la Junta de Andalucía, Juan Carlos Blanco, intervino para sorprender a su amigo de juventud Valentín García. Valentín “mantiene sus constantes vitales de energía, vitalidad, de brillantez, de ingenio, de elocuencia”, enumeraba, así, las cualidades de su amigo para asegurar al público que García es “uno de los tipos más brillantes verbalmente” que se pueden conocer.

Asimismo, Valentín emocionó a la concurrencia con su descripción del cáncer y de las sensaciones que le han transmitido los seguidores de su lema ‘Yo me curo’. “Gracias a la organización por haber reparado en este periodistilla como persona física que se merece este Solidarios”, dijo con voz alegre, al recoger el premio que sostenía Sánchez Rubio.

Por su lado, el presidente de la Fundación Márgenes y Vínculos, Francisco Javier Mena, recibió, de manos del alcalde de Granada, el premio de su ONG. “Este galardón es vuestro”, ofreció a sus compañeros que se encontraban en el patio de butacas.

El último ‘Solidario’ del año se lo llevó la Universidad de Granada. La vicepresidenta de la ONCE se lo entregó al director del proyecto UGR Solidaria, Juan Carlos Maroto, y a la vicerrectora de Responsabilidad Social, Igualdad e Inclusión, Teresa Ortega. Maroto celebró el alto número de alumnos que ha alcanzado esta iniciativa. “Los verdaderos protagonistas, los que hoy son premiados, son todos los voluntarios y voluntarias de la universidad”, afirmó para pedir un aplauso en su honor.

Para finalizar, Francisco Cuenca valoró de forma positiva que la ONCE hubiera escogido Granada para celebrar esta gala. El primer edil quiso resaltar que estos premios se les conceden, sobre todo, a “buenas personas” y que esta era una cualidad que compartían los homenajeados y la propia ONCE. Patricia Sanz, en nombre de la ONCE, cerró el acto acordándose de las mujeres con discapacidad. “Lo tienen más difícil que el resto”, sostuvo.

Con una foto de familia, en la que aparecían todos los premiados y autoridades, concluyó el acto. Nadie quería abandonar el teatro Isabel La Católica. Los invitados remoloneaban en ‘corrillos’. Es difícil asumir que las noches bonitas también terminan.