EN PRIMERA PERSONA: Cristina Barreto, directora de la Oficina Europea del Grupo Social ONCE

“La ONCE te abre todas las puertas en Bruselas”

Apasionada del Derecho Internacional desde muy joven, experta en negocio marítimo y en la Unión Europea, Cristina Barreto Zurrón (Ceuta, 1972), dirige la Oficina Técnica de Asuntos Europeos del Grupo Social ONCE desde septiembre de 2019. A medio camino siempre entre Madrid y Bruselas, Barreto goza de una posición privilegiada para valorar la magnitud del liderazgo internacional que el Grupo Social ONCE ejerce en Europa. Optimista, vitalista, europeísta, se declara seducida por el efecto de unidad en torno al interés común que provoca la política europea y muy esperanzada en los efectos que tendrá la Presidencia Española de la Unión Europea, en el segundo semestre de 2023, para el colectivo de personas con discapacidad gracias a la implicación activa de la ONCE.

Es usted afiliada a la ONCE desde 2013. ¿Cómo fue su proceso de pérdida de visión?

Yo estaba trabajando en Manpower, que es una multinacional americana, y ahí fue cuando tuve un bajón fuerte de visión. Desde aquí obtuve el certificado de discapacidad, fue un shock, porque yo no pensé que viera tan poco, y cuando recibí el certificado, con un 76%, pues en casa casi nos desmayamos. Ya con el certificado eché el currículum en Inserta Empleo, porque yo trabajaba como consultora de selección de personal y quería un cambio en Fundación ONCE. No era afiliada porque pensé que la afiliación solo era para personas ciegas totales. Llevé el informe médico y así opté a la afiliación, de pura casualidad. Tengo Stargardt, una degeneración de la mácula que hace que pierdas agudeza visual.

¿A qué edad fue eso?

Empecé a dejar de ver con 17-18, fue muy agresivo, pero me he adaptado muy bien porque fue poquito a poco, aunque cuando de verdad tuve el bajón de visión fue a los 25. Pero bueno, afortunada, porque me dio tiempo a acabar la licenciatura en derecho el Máster y todo.

No supuso un trauma en lo personal.

Bueno, hombre sí, porque lo primero tuve que dejar de conducir, que yo iba con mi coche a todos sitios. Y luego, ya con los niños, es complicado, tienes que adaptarte un poco.

¿Qué es Europa para usted?

Es el lugar donde puedes cambiar la vida de un montón de personas, donde de verdad puedes influir en lo que va a pasar en el futuro.

¿Y cuándo y cómo comenzó su idilio con Europa?

Cuando estudié la carrera de Derecho. El Derecho de Internacional me apasionaba. Entonces empecé a buscar posibles salidas en temas internacionales. Mi padre es ingeniero naval y siempre nos ha inculcado mucho el tema de barcos y vi que estaba muy vinculado al tema internacional, al Derecho Marítimo, a la gestión marítima. Y lo que hice fue un máster en Negocio Marítimo. Empecé a trabajar para un despacho de abogados que llevaba todos los litigios marítimos, que se suelen llevar en Inglaterra y estuve trabajando en la Asociación Española de Derecho Marítimo, pero solo dos años porque trabajar en un despacho de abogados me costaba mucho, era la época de Aranzadi (editorial especializada en temas jurídicos), todo en papel, en tinta y me costaba la vida buscar información y buscar sentencias, con mi vista no podía hacerlo.

¿Qué es lo que más que le seduce de Europa?

Sobre todo, el intercambio cultural y lo diferente que es España, porque allí, tengas la ideología que tengas, se trabaja de la mano y viniendo del país que vengas, con ideologías diferentes, todos trabajan por un mismo fin para conseguir un fin que les une. Eso, si lo unes con discapacidad, es maravilloso.

Es evidente que Ceuta se le quedaba chica.

Yo nací en Ceuta, seguí yendo a Ceuta hasta los 30 años, pero mis padres residían en Madrid desde que tenía 8 años.

¿Y cómo se ven Andalucía y Ceuta desde Bruselas Andalucía?

Es que tenemos muy buenos representantes andaluces allí en Bruselas. En materia de discapacidad, Andalucía es parte fundamental de España y los representantes que tenemos luchan por los intereses andaluces por encima de España así que si hacen un buen trabajo. Y Ceuta es muy importante para Europa, es la frontera de la Unión Europea con África, y por tanto la importancia estratégica es máxima, además los ceutíes estamos muy orgullosos de ser europeos.

¿Y el Grupo Social ONCE? ¿Cómo se valora su labor en Europa? 

El Grupo Social ONCE se ve como un referente mundial, sin igual, no tenemos nada parecido nada parecido. Ser un modelo social único en el mundo tiene unas consecuencias espectaculares. Tú cuando vas a la Comisión Europea, al Parlamento Europeo, a cualquier institución europea, la ONCE es espectacular y cuando contactas con alguien que no nos conoce, cuando le explicas qué hacemos aquí, se quedan impresionadísimos. Decir que vas de parte de la ONCE te abre todas las puertas en Bruselas, sea de la ideología que sea. Y la sorpresa que tenemos las personas de la ONCE que vamos a Bruselas es que pensamos que España está muy por detrás de otros países, como pueden ser Alemania, por ejemplo, y cuando conoces cómo se trata la discapacidad en Alemania y cómo se trata la discapacidad en España gracias a la ONCE, es que estamos a años luz, estamos muy por encima de todos los Estados miembros. Y las instituciones europeas lo saben, entonces cuando hay algún tema importante que tratar en Bruselas siempre se cuenta con la ONCE.

“Espero mucho de la Presidencia Española de la UE”

La ONCE de hecho ha participado activamente en el diseño de la Estrategia Europea.

En 2021 se aprobó una Estrategia sobre los derechos de las personas con discapacidad, que va a durar 10 años, lo aprobó la Comisión. Esto es una hoja de ruta que va a marcar en cualquier tema que tenga que ver con discapacidad en los próximos 10 años. Y la única organización nacional que estuvo en la constitución de los grupos de trabajo para su elaboración fue la ONCE de España. No hubo otro país, ni otra organización a nivel estatal. Había organizaciones paraguas que recogieron a muchas organizaciones europeas, pero como organización nacional solo estuvimos la ONCE en esta esta creación de esta hoja de ruta para los próximos 10 años.

Al presidente de la ONCE le gusta mucho decir que España es el país de la ONCE.

Sí sí claro, es que es marca España. Es que cuando tú sales de España y la ONCE para todas las personas que trabajan en las instituciones europeas en Bruselas están orgullosos de que la ONCE sea española.

¿Espera mucho de una Presidencia Española de la Unión Europea en el segundo semestre del 23?

Si, si, si. Estamos intentando desde este departamento que la discapacidad esté en todos los ámbitos de la Presidencia Española. Es difícil por la situación política que tenemos en España que la parte social esté por encima de otros temas. Sabemos que es la cuarta prioridad en cuanto a objetivos, que el Gobierno ha puesto sobre la mesa en Bruselas y pensamos que tienen que ocurrir hitos muy importantes a nivel europeo durante nuestra presidencia como que salga la tarjeta europea de personas con discapacidad, o que de verdad se trabajen en derecho al voto para las personas con discapacidad.

Y ahí hemos tenido mucho que ver.

Claro, es que somos los impulsores, somos los que estamos poniendo encima de la mesa en la Comisión, en el Parlamento, en el Ministerio de Asuntos Exteriores, en la Oficina que se ha creado en Moncloa para la Presidencia, desde aquí, con el vicepresidente Alberto Durán, hemos ido a ponerles sobre la mesa que es un tema muy fundamental que tiene que suceder durante Presidencia Española y estamos trabajando con ellos para crear además una Conferencia Ministerial de ministros de todos los Estados miembros para lanzar esta tarjeta.

En la práctica ¿qué va a suponer la para la vida de las personas con discapacidad?

Que más de 85 millones de personas con discapacidad en Europa nos podamos mover entre los países de la Unión Europea entre 27 países y que cada vez que salgas de España no tengas que volver a tramitar otra vez tu reconocimiento como persona con discapacidad, que puedas buscar empleo y que recibas el certificado discapacidad, que puedas tener un acceso al transporte, un artista todo el ocio y la cultura, vamos a ir despacito, no vamos a tener derecho a todo en cualquier Estado, pero ahora cuando llegues a un Estado todos los temas de movilidad, de transporte, de reconocimiento de personas con discapacidad para el empleo. Todo eso ya lo vamos a tener y nos vamos a poder mover libremente.

La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, quiere que el modelo del Grupo Social ONCE sea conocido y reconocido en Bruselas y en toda la Unión Europea y que sea copiado en otros países. Es un buen resumen del balance de la visita de los delegados territoriales y presidentes del Consejo Territorial de la ONCE en España a las instituciones comunitarias.

Sí sí, además la presidenta era miembro del Intergrupo de Discapacidad antes de ser presidenta, conoce bien el mundo de la discapacidad. Sabe que el modelo de del Grupo Social ONCE no tiene igual, y ella nos pide que seamos solidarios y que enseñemos nuestro modelo para que nos copien. Al Parlamento Europeo le encantaría que hubiera una ONCE en todos los países. Todos los eurodiputados que llevan temas de discapacidad, cuando tienen que hacer una consulta de un tema técnico, que de verdad quieran saber, nos llaman a la ONCE.

Dada su trayectoria laboral como consultora de inserción laboral ¿cómo valora los esfuerzos de Europa para apostar por el empleo de las personas con discapacidad?

Justo ahora se va a lanzar unas recomendaciones para fomentar el empleo de personas con Discapacidad de Europa. Es en una Conferencia Ministerial en Praga donde nos van a anunciar medidas y recomendaciones desde la Comisión Europea para que luego todos los Estados las implanten en sus políticas de empleo. Yo creo que el compromiso es fuerte.

¿No cree que todavía sigue siendo una asignatura pendiente por parte de los países miembros?

Hombre claro, es que hay mucha diferencia entre las políticas de empleo de todos los países, es que estamos a años luz. Como lo tenemos nosotros enfocado con los centros especiales de empleo, la economía social en España, los demás países no tienen ni idea. 

De todas formas, hemos avanzado mucho en lo que es el reconocimiento de derechos, pero todavía estamos lejos de conseguir una Europa igualitaria inclusiva ¿no cree?

Claro, claro todavía nos queda mucho. Es verdad que hay cupos que tienen que cubrir las empresas de más de 50 trabajadores, pero luego eso no se cumple y luego también que lo que las empresas buscan para cubrir esos cupos es gente muy poco cualificada. Cualquier puesto que ofertara una empresa debería estar abierto a personas con discapacidad y sin discapacidad.

España es líder en políticas de discapacidad.

Sí, sí, sí, totalmente.

¿Los localismos y los nacionalismos han hecho mucho daño al proceso de construcción europea?

Siempre hay extremos y mucho populismo, ahora sobre todo. Nunca había habido este nivel de populismo dentro del Parlamento, pero, aun así, no tiene nada que ver con la política que nosotros defendemos a nivel España. En Europa, un objetivo común, que puede ser por ejemplo el empleo para personas con discapacidad y eurodiputados de Podemos se unen con Ezquerra Republicana y con el Partido Popular o incluso con Vox y todos trabajan juntos en una mesa para lograr por los intereses de España y trabajan de la mano.

Qué pena que no sean capaces de hacer eso en Madrid ¿verdad?

Ya, ya. Es impresionante ver como en una mesa están sentados una eurodiputada de Podemos con otra de Vox y sacan adelante sus propuestas juntas.

Históricamente ¿el Brexit hará mucho daño a la Unión Europea?

Sí, sí, sí claro, nos hace mucho daño y nos ha quitado mucha riqueza, pero bueno Europa sigue adelante. Los que salen perdiendo son los ciudadanos de Reino Unido que han visto todos sus derechos y todas las opciones que tenían mermados ahora por no ser ciudadanos de la Unión Europea.

“A las personas con discapacidad nos cuesta mucho salir de España”

De todos los grandes desafíos que el mundo tiene por delante, el Cambio Climático, la guerra Rusia-Ucrania, la revolución tecnológica, el terrorismo… ¿Cuál le inquieta más como ciudadana?

A mí todo el tema de la guerra energética y todo lo que puede cambiar en un momento porque sí que es verdad que Europa iba por otros caminos, tenía otros objetivos, otras estrategias como el Cambio Climático para el 2030 o 2050. Los objetivos sostenibles que teníamos, ahora con la guerra de Ucrania han cambiado por completo. Los objetivos de la transformación digital han quedado en un segundo plano por todos los temas sanitarios también. Es verdad que Europa se ha propuesto que no tengamos que depender ni sanitaria, ni energéticamente de otros países. Pero a mí como ciudadana claro que me preocupa el tema energético, el cambio en la compra, el día a día que tenemos todos los ciudadanos, y el empobrecimiento que estamos teniendo ahora mismo todos los países, y más Europa, que depende mucho de otros países terceros.

La UE ¿saldrá reforzada o debilitada de la guerra de Rusia contra Ucrania?

Hemos sabido reforzado porque nos hemos unido y todos los Estados y estamos luchando juntos, igual que en el tema sanitario,  pero claro dependemos mucho de Rusia. Hasta ahora hemos tenido reservas, Europa tenía reservas, pero para el año que viene no va a haber reservas. Veremos a ver qué pasa.

Demasiadas incertidumbres.

Sí, son muchas incertidumbres porque tú puedes ser fuerte, pero cuando empecemos a pasar frío o la lista de la compra siga a encareciéndose, vamos a ver cómo reacciona Europa, si todos seguimos unidos, que esperamos que sí.

Es usted optimista por naturaleza.

Si, sí. Se me ha notado, ¿no?

En su perfil de Twitter de fondo el plenario del Parlamento Europeo ¿se ve algún día como europarlamentaria?

No, no, no, a mí me gusta llevar los intereses de la ONCE desde fuera , pero ya la política es diferente.

El Parlamento Europeo tiene 705 diputados. ¿Alguno de ellos tiene discapacidad?

Sí tenemos 5 personas con discapacidad.

De 705.

Pero al ir conociéndonos en el día a día hay varios de ellos que la tienen, aunque no reconocida.

Esa proporción no refleja la realidad de la sociedad europea.

Tenemos muy buenos representantes, tenemos una eurodiputada alemana de talla baja que es una activista espectacular y una luchadora por todos los derechos de las personas con discapacidad, y luego un caso de un eurodiputado griego con parálisis cerebral que vino a visitarnos y cuando estuvo en el hotel Ilunion dijo que nunca había descansado mejor en su vida. Pero si, el número es muy, muy reducido para el tanto por ciento de personas con discapacidad que vive en Europa. Estamos en torno a 85 millones de ciudadanos europeos con discapacidad.

Ahí fallan los partidos políticos.

España no tiene ningún representante con discapacidad reconocida. Lo primero que tenemos que pensar, autoevaluarnos, y ver como España con una organización como la que tiene una ONCE, un CERMI, que no tengan representantes políticos en sus listas es una cosa que tenemos que evaluar. Sin embargo, los eurodiputados españoles sí que están abiertos a que a que entren personas con discapacidad en sus listas, en sus despachos. Todas las instituciones europeas ahora han comenzado con un programa específico para captar talento con discapacidad. Pero yo creo que el problema también lo tenemos en España. Las personas con discapacidad, y yo lo hablo por mi propia experiencia, en las familias nos tiran mucho para que no salgamos de nuestra zona de confort. Yo he intentado desde que estoy como directora en esta Oficina que chicos con discapacidad vayan a hacer becas europeas y no lo he conseguido porque he visto que a las personas con discapacidad nos cuesta mucho salir de España. Vivir en un país que no sea el tuyo en una ciudad que no sabes cómo va a ser nos cuesta y las familias aquí en España, que son muy protectoras, cuando tienes una persona en tu familia con discapacidad te frena, es una barrera, pero más que lo que nos podamos encontrar fuera. La primera barrera que hay que derrumbar son las familias españolas que son muy protectoras con nosotros. Yo lo viví en mi propio caso, mi madre no quería de ninguna manera que yo cogiera ese puesto de trabajo porque ¿cómo iba una persona ciega a viajar?, ¿cómo iba a estar en Bruselas yo sola?

De todas formas, ha sido políticamente correcta a la hora de tirar de las orejas a los partidos políticos...

Ya, pero es que yo creo que los primeros que no queremos somos las personas con discapacidad también. Los partidos políticos a mí me han lanzado muchas opciones: “Si encuentras talento joven en la ONCE estamos encantados de que venga a trabajar a nuestro despacho en Bruselas”, o a la Comisión, que igual tiene un cupo para personas con discapacidad. Y no lo he encontrado porque no hay personas que quieran irse a trabajar fuera de España, es muy difícil, pero los partidos políticos europeos, por ellos encantados, porque para ellos es imagen.

Dígame la verdad, entre Bruselas, Madrid y Ceuta, se queda con Zahara de los Atunes.

Es que es el paraíso -se ríe-.

| LUIS GRESA